Seguro que habéis oído hablar del “kale” como un superalimento. Hoy Nutrición Donostia te trae una receta muy sencilla para que la probéis y os beneficiéis de sus múltiples propiedades. «Salteado de kale y gambas» Yo ya la he probado… ¿Y tu?
¡¡No te pierdas los comentarios abajo!!
Ingredientes para 4 personas:
- 800 g de col kale.
- 32 gambas congeladas de tamaño medio.
- Ajo
- Aceite de oliva.
- Sal
Preparación:
- Limpiamos las hojas de Kale y eliminamos la parte más gruesa del tallo.
- En una vaporera u horno de vapor, disponemos las hojas de kale que dejaremos cocer durante 7 minutos.
- Mientras tanto, sacamos a temperatura ambiente unas gambas congeladas que habíamos dejado descongelar desde la noche anterior en el frigorífico. Escurrimos el agua de descongelación y reservamos.
- Picamos en láminas las hojas de esta col y las ponemos a escurrir en una fuente sobre papel absorbente de cocina.
- Reservamos.
- En una sartén tipo wok, disponemos 3-4 cucharadas de aceite de oliva.
- Picamos unos ajos y los doramos en el aceite.
- Añadimos las gambas descongeladas y las doramos en la sartén junto al ajo.
- Por último, salteamos las hojas laminadas de kale y listo!!
¡¡Ya tenemos la cena “completa” de hoy lista en un momento!!
Consejos de tu nutricionista:
El kale, considerada por muchas celebrities como “superalimento” no es más que otro tipo de col rizada que hasta no hace muchos años se empleaba para el consumo animal, principalmente en centroeuropa.
Sin embargo, es diferente… ¡¡veamos por qué!!
Entre sus propiedades se encuentra:
- Bajo aporte calórico: 45 kcal/100g
- Alto aporte de proteína y fibra.
- Minerales: Calcio, Hierro, Magnesio, Potasio y Zinc
- Vitaminas: C, A, E y K
- El aporte de calcio en los alimentos de origen vegetal es controvertido, ya que los oxalatos y fitatos contenidos en los mismos, evitan su absorción intestinal. Sin embargo, el Kale dispone de bajo contenido en fitatos, oxalatos y taninos de modo que resulta tan buena fuente de calcio como los lácteos y un excelente alimento para dietas veganas.
- Un efecto similar se da con el hierro. En los alimentos vegetales el hierro se encuentra en su forma “No hemo” por lo que no se absorbe si no es oxidado a “Hierro Hemo”. Esto lo conseguimos, como bien saben mis pacientes, aumentando el aporte de vitamina C en la misma comida.
- En cuanto a las vitaminas, es recomendable preparar las verduras al vapor para evitar su pérdida por lixiviación y por degradación térmica como os he expuesto en otras recetas.
- El alto contenido en vitamina K la hace no aconsejable para aquellas personas que toman anticoagulantes como el “Sintrom”.
- El consumo diario durante al menos 12 semanas ayuda a reducir el riesgo cardiovascular en hombres, aumentando los valores de HDL-colesterol (colesterol bueno) y reduciendo el riesgo aterogénico en un 27%.
- Por último, las coles son verduras de efectos bociógenos por lo que su consumo no es recomendable para aquellas personas con problemas de tiroides. Si bien, recientes estudios sugieren la concentración de bociógenos no es tan elevada en el kale y el brócoli por lo que el consumo de no supone un incremento en el riesgo.
Ahora ya sabes más sobre las propiedades de esta verdura que podemos encontrar en nuestros mercados.
Tu dietista-nutricionista te aconseja unos u otros alimentos en función de tus necesidades específicas.